viernes, 25 de marzo de 2011

Nos vamos a divertir



24 de marzo de 2011. Sol abrasador en Miami a eso de las cinco de la tarde en la pista 8. Hace escasamente unos minutos, el veterano Olivier Rochus ha despachado tras más de tres horas en pista al esloveno Blaz Kavcic por 3-6 6-4 7-5 en la 1º ronda del Masters 1000 de Miami. El jugador belga de 30 años y profesional desde 1999, disfruta de su primera victoria de la temporada en un torneo ATP. Procedente de la fase previa y tras ganar el challenger de Le Gossier en la isla francesa de Guadalupe, el diminuto Oli (jugador más bajito del circuito) se encuentra de nuevo situado entre los top-100, tras iniciar la temporada lesionado y estando fuera de esos puestos de honor, verse obligado a jugar los siempre duros challengers europeos de pista dura, más complicados para él si cabe que tiene que enfrentarse en pistas rapidísimas a jugadores con saques cada vez más veloces. Escasamente hora y media después de que Rochus ganase su partido, en una pista cercana a esa, el gigante Ivo Karlovic se despide tempranamente del torneo tras caer ante el siempre incómodo Florian Mayer en 2 sets. El croata, que hace apenas una semana estuvo a dos puntos de ganar a Rafael Nadal en cuartos de Indian Wells, sucumbe a las primeras de cambio. Así es el tenis. Los focos se los llevan otros.
Merecidamente se los lleva el serbio Novak Djokovic. Absoluto dominador del circuito en estos tres primeros meses de competición. Invicto en lo que va de año, ganó el Open de Australia cediendo solo un set (ante Dodig en 2º ronda), ganando a Federer en semis y en la final a un Andy Murray que desde entonces no ha podido ganar un solo partido. En el torneo ‘500’ de Dubai el balcánico sumó su tercera corona consecutiva, ganando a Federer por segunda vez en 2011, y de nuevo sin ceder un set. Por último también venció en Indian Wells, demostrando que le ha perdido el respeto al suizo ganándole por tercera vez en los últimos tres torneos, y en la final superó un dubitativo inicio para acabar imponiéndose a un Nadal que amenazaba con seguir ganando en California en los años impares (ya se había llevado el trofeo en 2007 y 2009). La impresionante racha de Djokovic puede seguir en Miami, sería increíble si ganara también en Cayo Vizcaíno, pero lo que está claro es que hay que empezar a contar con él como posible número 1 en el futuro. Ha dejado atrás sus fantasmas con el servicio que tanto le han atormentado, se le ve lleno de confianza y con un físico que nunca antes le habíamos visto. Su victoria ante Nadal no fue como las demás, esta vez destruyó al manacorí a base de solidez desde el fondo, no buscaba tanto el winner, y el español se desesperó al ver que el serbio llegaba a todas las bolas y que luchaba todos los restos aprovechando el bajo porcentaje de primeros del balear.



 La temporada de tierra sin duda puede ser decisiva para saber si puede haber nuevo número uno esta temporada. Ya en 2009 Djokovic hizo una sensacional gira europea de tierra batida, llegando a la final de Montecarlo y Roma, y a semis de Madrid, cayendo en las tres ocasiones con el que parecía un invencible Nadal. El serbio tuvo varias bolas de partido en las semifinales del torneo madrileño, estuvo realmente cerca de conseguirlo, pero Rafa volvió a escapar vivo de una situación tremendamente complicada. En Hamburgo 2008 se jugaban ambos el no.2, y Nadal sobrevivió a un durísimo partido, con el techo cerrado mientras Djokovic atacaba la bola con violencia buscando vencer al imbatible. Quizá este año pueda conseguirlo, no lo sabemos, lo que está claro es que Nadal, que aún tiene mucha ventaja en el ranking, va a vender muy cara su derrota en el que caso de que ésta se produzca.


La temporada de tierra será clave para el ránking de entradas


Otros de los focos de atención en este inicio de año se los llevan las jóvenes promesas. Parece que va siendo hora de un cambio generacional. Los últimos jugadores jóvenes que irrumpieron con cierta fuerza en el circuito fueron Juan Martin Del Potro y Marin Cilic, ambos nacidos en 1988, y eso fue en un año 2007 que ya queda bastante lejano.
El tenis cada vez se vuelve más físico y a los precoces talentos cada vez les cuesta más asentarse en un circuito que se endurece más y más. El jugador promesa que en cierta manera ha revolucionado el circuito en este 2011 es sin duda Milos Raonic. Altísimo jugador canadiense de origen montenegrino, de solo 20 años, alcanzó los octavos de final del Open de Australia procedente de la fase previa y tras dejar en el camino a todo un top-ten como Mikhail Youzhny. Ferrer, posterior semifinalista, acabó con el sueño del ‘canuck’ en 4 sets, pero el joven Milos ya había avisado. Recompensado con una WC en el torneo de San José, fue avanzando rondas hasta llegar a la final, en la que ganó a otro top-ten como Fernando Verdasco, alzándose así con su primer título ATP. Apenas sin descanso, volvió a ganar al madrileño en la primera ronda del ‘500’ de Memphis, y siguió avanzando rondas hasta llegar a la final, donde solo un inspiradísimo Roddick le batió en 3 durísimos sets (7-6 6-7 7-5) y tras un último punto de infarto, en el que el de Nebraska llegó en el fondo de pista a una gran volea de Raonic, y le dio tiempo a conectar un passing ganador tirándose en plancha.
En Indian Wells se presentaba Milos dispuesto ‘a liarla’. Batió pronto a un cabeza de serie (Mardy Fish), pero en 3º ronda no pudo con otro joven talento, el estadounidense Ryan Harrison, de solo 18 años, descarado y explosivo jugador que está cerca de asomar entre los cien mejores de la ATP. De todas formas la progresión de Raonic es envidiable, empezó el año en el puesto 156 y tras poco más de tres meses está en el puesto 34. Con un servicio temible, una gran derecha y unos nervios de acero, nos recuerda en ocasiones a Pete Sampras. Quizá estemos ante uno de los nuevos dominadores del circuito, lo veremos a lo largo de la temporada.

El canadiense Milos Raonic encabeza la lista de futuros cracks

Habrá que estar atentos también a lo que nos deparan otros jóvenes como el lituano Richard Berankis, que alcanzó la 3º ronda en Australia y que se está consolidando en el top-100, una especia de mini-Hewitt. Dimitrov sigue pasando previas pero es incapaz de momento de pasar rondas en torneos de mayor enjundia, las comparaciones son odiosas, y mucho más si te comparan con Federer. Tomic mientras tanto parece que solo rinde bien en Australia. Nishikori es el más mayor de todos (de finales del 89), pero por las lesiones solo es su segunda temporada completa jugando torneos ATP. Poco a poco va cogiendo regularidad y consistencia, mañana mismo se medirá a Nadal en la 2º ronda del torneo de Miami en lo que será un buen test para ambos. En definitiva pasen, vean y disfruten del tenis. Nos espera una gran temporada, nos vamos a divertir.

martes, 15 de febrero de 2011

Gustavo Kuerten, gran tenista y mejor persona

A Gustavo Kuerten muchos lo recordaran por aquel dibujo que hizo al ganar Roland Garros, con su raqueta dibujó sobre la arcilla un corazón gigante que describía el idilio que vivía con el siempre exigente público parisino. Gustavo se retiró en 2008, aunque fue en el 2004 cuando ganó su último torneo.
Aquel tenista rubio con pelos rizados y equipación llamativa de la firma Diadora, cautivaba a todo el mundo por su simpatía y sencillez. Su juego era cuanto menos curioso, sus golpes eran de un recorrido muy largo, jugaba muy profundo y acompañaba cada golpeo con un grito largo como nunca se había oído en una pista de tenis, todos sabemos que los gritos de los tenistas son por el esfuerzo, pero el de Kuerten alimentaba y alimenta aquellos debates que consiten en poner en ponerlo en duda.
La forma de jugar de "Guga" parecía hecho a medida para la tierra batida, patinaba muy bien en cada golpe, llegaba bien con sus piernas espigadas y definía muy bien cada golpe después de plantar perfecto de pies. Conseguía una velocidad de bola alta por la época en se encontraba el tenis, también un buen físico. Si bien su saque no era lo mejor que poseía, sus profundos golpes con altas dosis de peso de bola le hacían un jugador dominante, sobre todo en tierra batida.
Justamente el primer Grand Slam conseguido por "Guga" fue el detonante de la caída de otro grande de Roland Garros, Sergi Bruguera. Guga no dió ninguna oportunidad al bicampeón catalan y le endosó un 6-3 6-4 y 6-2 sin paliativos. El brasileño llegaba a la final de París como nº 66 del Ránking de entradas de la ATP, y saldría de la Philippe Chatrier como nº 15 un par de semanas más tarde, dotando a la ATP de aire fresco con su aparición. Para más sorpresa ese era el primer título en la carrera de "Guga".
 
La carrera de Kuerten sólo queda machada por las lesiones, y es que le marcaron mucho en toda su carrera profesional. No fue hasta un año después de derrotar a Bruguera que consiguió otro título ATP; en el 98, ganó Stuttgart y Mallorca y en el 99 Montecarlo y Roma dos de los históricos torneos de tierra de siempre, el 2000 fue otro año clave en la carrera de "Guga" y de toda su "torcida" brasileña, hace falta reseñar que para un país como Brasil Kuerten se estaba convirtiendo en un fenomeno de masa. Ganó Santiago de Chile y Hamburgo antes de volver a coronarse campeón de Roland Garros por segunda vez, tres años más tarde de su aparición al top tenístico volvía a ser París quién le diera la gloria, en esa final derrotó a Magnus Norman, actual preparador en el circuito de Robin Soderling, 3 sets a 1 y segundo en su palmarés.




El juego de Kuerten tenía magia, la magia de jugar una bola profunda combinada con una dejada con efecto, al tener un golpe tan largo y con tanto recorrido, por poco que fintara un golpe profundo se sacaba unas dejadas para el recuerdo. También abría muy bien los ángulos con su revés y tenía potencia con el drive. Sus buenos movimientos de pies le ayudaban mucho.Una de las características curiosas del juego de Kuerten es que pegaba la bola batsante de caras, cuando la teoria siempre dice que hay que pegar de lado, de hecho todo su juego era característico y gratamente diferente hasta entonces.

El año 2000 le guardaba una sorpresa al bueno de "Guga", conseguiría alzarse con el título en el Masters Cup de Lisboa, ganando a todo un histórico, André Agassi, era un título que demostraba que no sólo sabía ganar en arcilla si no que en dura y rápida como era el carpet de lisboa también podía dar que hablar. El títlo del Masters venía precedido de Indianápolis (cemento). Además a finales de este mismo año conseguía el nº 1 del mundo, otro bien merecido galardón.

La carrera de Kuerten no paraba, esta vez respetado por las lesiones consiguió afianzarse tras el exitoso 2000 y antes de Roland Garros se adjudicó Buenos Aires, Acapulco y repetiría en Montecarlo, volvía París, volvía el idilio con la Philippe Chatrier, y otra vez dibujó el corazón para agradecer las muestras de cariño recibidas por el publico francés. Un vez más se cruzó con el camino de un español, otro histórico que a la postre no conseguiría ganar Roland Garros, Àlex Corretja, si bien el catalan consiguió adjudicarse el primer set en tie-break, Kuerten cerró el partido con 7-5 6-2 y un doloroso 6-0 en el último set. La historia estaba escrita, Roland Garros por partida doble. Corretja no supo como parar el vendabal de piernas, potencia y consitencia del brasileño y sucumbió contra un histórico de la tierra batida. 2001 lo cerró ganado Stuttgart y Cincinnatti.

A partir de ahí empezó la caída, los problemas de espalda se hacían mayores y si bien se jubiló del circuito en 2008, las cosas pasarían a ser diferentes en cuánto a ránking y resultados. en 2004 ganaría su último título en su país Costa do Sauipe. Él siguió intentando volver, y el juego lo tenía, pero el físico no respondía hasta que decidió retirarse. Quedó muy tocado por la prematura retirada, pero por lo menos su tenis le dió la gloria. En la actualidad Bellucci intenta recojer el testigo de su compatriota, aunque la tarea sea complicada.

Gran parte de los exitos económicos de Gustavo Kuerten han sido y son destinados a una fundación para personas deficientes psiquicas, enfermedad que padece su hermano, siempre ha estado muy volcado por la labor. Cuando uno habla de Kuerten recuerda sus éxitos deportivos, pero su sonrisa y su empeño pese a lesiones y malos momentos son dignos de elogio.

O Rei Gustavo Kuerten.

www.guga.com